La temperatura normal de un bebé, al igual que en los adultos, puede variar ligeramente dependiendo de factores como la edad, la hora del día y la actividad. En general, se considera que la temperatura normal de un bebé se encuentra en el rango de 36.5 a 37.5 grados Celsius (97.7 a 99.5 grados Fahrenheit). Es importante recordar que la temperatura de un bebé puede fluctuar a lo largo del día y también puede verse afectada por factores ambientales, como la temperatura de la habitación o la ropa que lleva puesta.
Cómo medir la temperatura de un bebé
Existen diferentes métodos para medir la temperatura de un bebé, algunos de los cuales son más precisos que otros. Los métodos más comunes incluyen:
- Termómetro digital oral, axilar o rectal: Estos termómetros son fáciles de usar y proporcionan lecturas precisas. Para los bebés, se recomienda utilizar el método axilar (debajo del brazo) o rectal para obtener una medición más precisa.
- Termómetro de oído (timpánico): Este tipo de termómetro se coloca en el oído del bebé y mide la temperatura a través de la membrana timpánica. Aunque es rápido y fácil de usar, puede ser menos preciso que los termómetros digitales si no se coloca correctamente.
- Termómetro de frente (temporal): Este termómetro se desliza por la frente del bebé y mide la temperatura de la arteria temporal. Es rápido y no invasivo, pero puede ser menos preciso que otros métodos.
Cuándo preocuparse por la temperatura de un bebé
Es importante estar atento a las siguientes situaciones en las que la temperatura de un bebé puede ser motivo de preocupación:
- Fiebre: Si la temperatura de un bebé supera los 38 grados Celsius (100.4 grados Fahrenheit), se considera fiebre. En bebés menores de 3 meses, una fiebre debe ser evaluada por un médico de inmediato.
- Hipotermia: Si la temperatura de un bebé es inferior a 36 grados Celsius (96.8 grados Fahrenheit), puede estar experimentando hipotermia, que también requiere atención médica.
Consejos para mantener la temperatura adecuada de un bebé
- Vístelo con ropa apropiada: Asegúrese de que su bebé esté vestido adecuadamente para el clima y la temperatura de la habitación. Una regla general es vestir al bebé con una capa más de ropa de lo que un adulto usaría para sentirse cómodo en el mismo ambiente.
- Mantenga la habitación a una temperatura confortable: La temperatura ideal para la habitación de un bebé está entre 20 y 22 grados Celsius (68 y 72 grados Fahrenheit).
- Evite el sobrecalentamiento: No utilice mantas eléctricas, bolsas de agua caliente o almohadillas térmicas para calentar la cuna del bebé, ya que pueden aumentar el riesgo de sobrecalentamiento.
- Verifique la temperatura de su bebé regularmente: Si está preocupado por la temperatura de su bebé, tómela utilizando uno de los métodos mencionados anteriormente y consulte con su médico si tiene alguna preocupación.
Recuerde que la temperatura normal de un bebé puede variar ligeramente, pero si tiene alguna preocupación sobre la temperatura de su bebé o su salud en general, siempre es recomendable consultar con un profesional médico.
Acerca del experto
Laura Ferrer
Laura Ferrer es una pediatra con más de 12 años de experiencia en el cuidado de la salud infantil. Se especializa en el tratamiento y prevención de enfermedades en niños y adolescentes, así como en la promoción de estilos de vida saludables para el bienestar a largo plazo de sus pacientes.